Si tu ropero parece una leonera, te interesará conocer cómo organizar la ropa de tu armario. ¿No te ha pasado que siempre acabas poniéndote lo mismo por no tener que rebuscar entre tantas prendas otro modelito? Di adiós al caos con estos trucos, que te ayudarán no solo a ordenar tu ropa, sino a hacer limpieza de todo aquello que llevas temporadas sin ponerte. Además, si sientes que ha llegado la hora de renovar el vestuario, ¡no dudes en consultar el catálogo de PLNS!
Lo primero para organizar la ropa del armario: haz limpieza
Ya lo decía Marie Kondo, la gurú japonesa de la organización: quédate solo con aquello que te haga feliz. En otras palabras, conserva únicamente esa ropa que vas a ponerte. Pero, ¿cómo decidir qué prendas deberías quedarte y cuáles no?
Lo primero es preguntarte si te has puesto la pieza en cuestión en los últimos meses. Si la respuesta es sí, te la puedes quedar, porque muy probablemente te sientas a gusto con ella. Si la respuesta es negativa, entonces, pasa a probártela. Si sientes que no te favorece, aparca la nostalgia y deshazte de una vez por todas de esos artículos que lo único que hacen es ocupar espacio.
Otro truco efectivo que tiene que ver con esta idea es realizar una semi-limpieza con aquellas prendas de ropa que, por el contrario, sí te pones mucho. La clave está en que las apartes por un tiempo, almacenándolas en cajas de plástico, de manera que no tengas más remedio que dar uso al resto de ropa. Hazlo con aquellas prendas de vestir que adoras, pero que, siendo sincera, estás a un paso de aborrecer por llevarlas tanto.
6 pasos para poner a punto tu ropero
Después de hacer limpieza, toca aplicarse a fondo para organizar la ropa del armario. He aquí 6 pasos para que, por fin, en tu ropero reine la armonía.
1. Vacía toda la ropa y clasifica
Una vez has seleccionado qué prendas quieres que permanezcan en tu guardarropa, para que la labor resulte más sencilla, lo más aconsejable es vaciarlo. Para empezar a ordenar, puedes separarlas por tipologías. Por ejemplo, realiza un montón con los jerséis, otro con las camisetas de manga corta, otra con las camisas, etc. Es más, la clasificación puede ir más allá y continuar separando piezas, por ejemplo, en función del estilo: pantalones elegantes vs. pantalones informales, jerséis gruesos vs. jerséis ligeros…
2. Organiza en función de la temporada
Si dispones de un armario lo suficientemente grande como para almacenar toda tu ropa, coloca aquellas prendas de la temporada presente en un lugar más accesible que el resto. Lo ideal es que sitúes las camisetas, camisas y demás artículos que vas a ponerte en los próximos meses a una altura de entre 100 y 200 cm y el resto de piezas que no lucirás hasta la temporada próxima, en una zona de menor alcance.
3. Rodéate de barras, perchas y otros accesorios
Las baldas son muy prácticas, pero resulta mucho más útil que el armario esté dotado de diferentes accesorios para colgar las prendas. Las barras y perchas forman el tándem perfecto, pues te permiten aprovechar al máximo el espacio. No solo tu ropero lucirá mucho más ordenado y estético, sino que podrás identificar en un santiamén el atuendo que deseas ponerte. Para las camisas, mucho mejor si son perchas de tamaño mediano, mientras que para las chaquetas, opta por unas más anchas. Para los pantalones, apuesta por perchas metálicas denominadas pantaloneros.
4. Ordena las prendas por categorías
Otra fórmula para facilitar la identificación de las piezas de ropa es ordenarlas por categorías. Por ejemplo, puedes colocar juntas las camisetas de tonalidades parecidas, las de manga corta, las de tirantes, las camisas, etc. Esta iniciativa permitirá que encuentres la prenda en cuestión en un santiamén.
5. Organiza tus complementos
A la hora de organizar la ropa del armario, nos enfrentamos a otro escollo: ¿cómo clasificar los accesorios? Se acabó eso de arrojarlos sin orden ni concierto en un cajón. ¡Imaginación al poder! Por ejemplo, puedes exprimir al máximo ese rincón del guardarropa en el que queda un hueco para colgar una barra para los cinturones o aprovechar una percha para enrollar cuatro o cinco bufandas y pañuelos.
6. Una escalera para el calzado
¿Qué hacemos con el calzado? Organiza tus zapatillas y botas situándolas sobre las baldas de una escalera. Puedes sacarle partido a una que ya no utilices, pintándola en un color bonito. De esta manera, se convertirá en un elemento no solo decorativo, sino tremendamente funcional.
¿Has tomado nota de todos estos tips para organizar la ropa en tu armario? Así no tendrás remordimientos si decides hacerte con nuevas adquisiciones de Polinesia. Con estos consejos, ¡siempre tendrás todo a mano y ordenado!